Gracias :)

Hola...
Bueno, he decidido colgar para no dejaros intrigadas porque no es justo que por mis problemas os quedéis sin leer.
Quería agradeceros que me diérais vuestro apoyo y consejo, según me han dicho, he sido bastante valiente con el problema :)
Por eso os dejo aquí un Cap. que espero que os guste, está escrito con Aria.
Cuando esté mejor os lo comunicaré, besos ;)

Estaba cansada, a pesar de que no iba andando, pero el camino era eterno. Aunque desde que Nick se había arriesgado para salvarme de Esme ya no me caía tan mal.
-Nick, ¿queda mucho?
-No, estamos llegando. ¿Estás cansada?
-No - mentí.
Noté como Val me miraba con preocupación. Desde que había llegado, hacía dos días, a penas había abierto la boca. Yo creía que aquella no era la Val alegre que conocía. Y sabía que algo en el mundo e había torcido... Si no no me estaría pasando esto...
Entonces mis pensamientos volvieron a lo siempre. Erik. No podía quitármelo de la cabeza, su imagen era como mil cuchillos clavándose en todo mi cuerpo sin piedad.
Me estremecí y casi me caí del lomo de Nick, que gritó:
-¡¿Quieres tener cuidado y dejar de moverte?!
Desde eso hasta que llegamos nadie volvió a abrir la boca.
Mi nuevo "hogar" era grande y espacioso, tenía un bonito jardín y la casa estaba muy bien pintada y decorada, un lugar tranquilo y bonito. Para mi, todo lo contrario.
Ya casi era de noche, así que entramos en la casa y cada uno se instaló en una habitación con toda comodidad.
Luego bajamos al salón.
-¿Que te parece? - preguntó Nick, que hacía como si Val no existiera.
-Es muy bonita, ¿es tuya?
-Si, es mía.
Estuvimos en silencio hasta que Val me preguntó:
-¿Que quieres cenar, Aria?
-Yo - respondí - solo quiero algo calentito.
Entonces cerró los ojos y se concentró en algo, en ese instante aparecieron tres platos de sopa, lo que me extrañó fue que también había para Nick.
Comimos en silencio agradecidos por la buena comida que teníamos gracias a mi mejor amiga. Y cuando acabamos fue cuando por fin me atreví a exigir lo que me debían.
-Y ahora, quiero que me contéis TODO - enfaticé la palabra - desde el principio hasta el final. Creo que me lo debéis.
-Está bien - dijo Val - Yo te lo contaré...